El programa de necesidades requería un edificio de oficinas orientado hacia el sector del mercado relacionado con el arte, el periodismo, el diseño y la publicidad.  Además de oficinas de alquiler se necesitaba un estudio fotográfico con características muy específicas en cuanto a área, altura, luz materiales y un café-restaurante abierto al público.

La topografía del terreno es muy quebrada, con una gradiente hacia el sur y hacia el sur oeste y con un suelo de no muy alta resistencia, por lo que se optó por un edificio liviano, de estructura de acero y que se adaptara al terreno sin modificarlo.  El edificio está construido en su totalidad en la parte de mayor pendiente, sin que el piso toque el terreno y evitando los muros de retención, quedando la parte plana al frente para estacionamiento.

Urbanamente el edificio juega en formas, escala y altura con el vecino edificio Centro de Arquitectura, creando un conjunto harmónico sin que ninguno de los dos pierda su identidad.

El lobby de entrada, por requisitos de programa y a pesar de su estrechez, debía tener algún atractivo especial. Se optó por abrirlo hacia la vista al sur y se diseñó una escalera lo más liviana y transparente posible cuyos elementos estructurales fueran de secciones mínimas y se suspendió con cables de acero. Para ensanchar el espacio y «aumentar» la vista se enchaparon las paredes laterales en espejo lo que a la vez reproduce la imagen de la escalera al infinito y produce un espacio de características irreales, se utililizaron primordialmente materiales fríos como el acero inoxidable, aluminio, vidrio y espejos, contrastados por un material cálido como lo es la madera.

El café a un nivel de aproximadamente 60cm sobre el nivel de la calle se diseñó de manera que, a pesar de su poca área tuviera dos espacios definidos y diferentes, aunque ambos con carácter de balcón o terraza.  Uno orientado hacia el frente del edificio (un poco como anuncio, o de «presencia» en el contexto) y el otro posterior viendo hacia las montañas del sur y el atardecer.  Ambos se abren para crear una ventilación cruzada, hacia el norte con puertas corredizas y hacia el sur con ventanas colgante que giran hacia arriba y afuera para una vista sin marcos y protección contra la lluvia.